Vamos a compartir algunas miserias que tambien tenemos nosotros los grossos.
Ayer (creo) termine de escribir la segunda novela.
Tengo que trabajarla mucho, puede ser que no este terminada del todo. Pero casi. Digamos que el final ya esta.
Celebremos? Si. Pero tambien somos un poquito reventados a veces.
Y enseguida digo "bueno, si, pero editar esta novela... va a ser mas dificil que la anterior". El tema es que el hobby se hizo grosso. Pasaporte sobrepaso toda expectativa. No solamente lo edite. No solamente lo tienen muchisimas librerias. No solamente me hicieron una nota en la radio. No solamente lo sali a vender por las calles con bastante exito. No solamente lo leyo gente conocida. No solamente lo leyero sino que tambien me dieron tremendos feedbacks.
Y lo unico que yo queria era poder imprimirlo y hacer 1 (un) libro para prestarlo en fila a los que viven por aca.
Todo fue superandose hasta que los suenios se apoderaron de mi mente infantil, soniadora, y por que no, ambiciosa.
Pienso en gente que tuvo alguna suerte o contacto o lo que sea, ademas de talento, y me imagino OTROS dramas: el editor le dice "saca eso de la iglesia porque te tiras el pais entero encima, pone un poco mas de sexo, mete un personaje metrosexual (?)" etc etc. Supongo que no debe ser todo un lecho de rosas. Supongo y casi lo afirmo.
Pero igual. Asi de reventaditos somos a veces.
Escribir es un disfrute en si mismo. Cuando me pongo frente al teclaod gozo. Soy un hado padrino (?) que hace y deshace. Que todo lo puede. Se siente bien.
Tiro adelantos por aqui o alla y recibo entusiasmo.
Todo eso deberia ser suficiente. Pero uno es imbecil y suenia. Y se ilusiona poco y deprime mucho.
Asi es.
Los grossos tambien tenemos nuestros domingos de perros.
Brindemos por la novela. Que les va a partir el bocho. Cuando llegue el momento.
(si leo este post lo borro, asi que no lo leo)
(bah, en SB nunca miro para atras)
Auguri!
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